Riolama Fernandez
Actualmente en Venezuela, una gran cantidad de personas, se autoproclaman bolivarianos y revolucionarios, bajo la consigna “Patria, Socialismo o Muerte” y se atreven a mirar con desdén a quienes ellos consideran no son bolivarianos. Sin embargo, es lamentable como estás mismas personas desconocen el pensamiento político de Simón Bolívar y el alma de la ideología bolivariana, tergiversando su sólido y profundo propósito definitivamente democrático de emancipación política, igualdad social, justicia económica, unidad americana, conciencia histórica y perfección moral.
Para Simón Bolívar
la revolución política se enmarca y define con dos grandes palabras:
Emancipación y Equilibrio. Su más grande aspiración revolucionaria era la Independencia del
mundo neo-hispano, la obtención de la autonomía contra la subordinación a la
corona española, contra la opresión o el despotismo, el derecho de regirse,
hacerse, de disponer de su suerte y elegir su rumbo, en otras palabras LA LIBERTAD.
Simón Bolívar
anhelaba la perfección política cuyo norte no era otra cosa que la libertad. “La Libertad es el único
objeto digno del sacrificio de los hombres”, “Siempre es grande, siempre es
noble, siempre es justo conspirar contra la tiranía, contra la usurpación, y
contra una guerra desolada e inicua”.
La
emancipación alude a lo político inmediato de la necesidad de desprenderse de
la colonia española, pero la independencia tiene un alcance mayor, pues no
solamente es la separación del imperio español sino también la edificación
jurídica de un continente libre, soberanía económica, realización integral de
la justicia e inspiración en lo moral. “No basta que nuestros ejércitos sean
victoriosos: no basta que los enemigos desaparezcan de nuestro territorio, ni
que el mundo reconozca nuestra independencia; necesitamos más aún ser libres
bajo los auspicios de leyes liberales, emanadas de la fuente sagrada que es la
voluntad del pueblo”
Bolívar
sabía que la independencia no iba a ser obra de una sola generación, que la
lucha por la independencia habría de librarse “Cuantas dependencias nos
encadenen”.
La
revolución de Bolívar era política
(emancipación del yugo español), económica
(estructura de asalariado y el disfrute de los hispanos del producto de su
propio suelo), social (abolición de
la esclavitud y de los privilegios, afianzamiento de la igualdad) jurídica (creación del derecho
americano), histórica (mística de un
programa de paz y armonía universal en una sociedad segura de su destino, pero
fundamentalmente la revolución de Bolívar tenía como principio una Reforma Espiritual, cuya meta era el
triunfo de la Moral.
También es
revolucionario el propósito de Equilibrio de Simón Bolívar. Una vez rota la
dependencia política había que continuar la obra. La autonomía era el máximo
bien logrado, se hacía necesario encontrar un punto medio entre
la Ley y la
realidad social, entre el gobierno y el pueblo, entre los cambios y la
estabilidad. Todo debía estar
reflejado en una norma jurídica y nunca divorciarse del Derecho. La ley para
Bolívar era el único instrumento del progreso. Entre el Derecho (regla de
avance) y la realidad que va a ser regida, el ideal es el equilibrio.
Equilibrio entre Pueblo y Gobierno. “Los ciudadanos deben gozar de todas las
garantías, de toda la libertad e igualdad legales que sean posibles y el
gobierno debe ser respetado y afianzado en situación que le permita hacer
respetar la voluntad colectiva. Equilibrio entre los deberes y derechos de los
ciudadanos y el de las facultades del gobierno”.
Ante un problema de anarquía y la posibilidad de
tiranía puede surgir el dilema de optar por la opresión o el desorden, en estos
casos Bolívar propone: “Ni opresión, ni
desorden. Ni anarquías demagógicas ni tiranías monócratas”. Entre ambos
términos señala como posibilidad de compensación el gobierno popular y
REPUBLICANO y para salvar escollos, “está la constitución para detener la
colectividad en sus excesos y frenar la autoridad en sus desmanes”.
Equilibrio creador es la consigna del Libertador
“Conciliar la existencia de la república, los derechos de los ciudadanos, la
firmeza del poder, la estabilidad de las instituciones, dar al pueblo toda la
suma de dicha y de libertad y al gobierno toda la energía y fuerza posibles sin
conmociones escandalosas que nos hagan débiles en lo interior y censurables en
lo exterior”.
La revolución de Bolívar consiste en “destruir un
sistema nocivo, sustituirlo por el que el pueblo anhela y defenderlo de todas
sus acechanzas”
“Para moderar la voluntad general y limitar la
autoridad pública…para que haya menos confrontación posible entre voluntad y el
poder legítimo, se puede concebir una regla que debe dirigirnos y es la
restricción. Esta ciencia se adquiere por la práctica y por el estudio. El
progreso de las luces es el que ensancha el progreso de la práctica y la
rectitud de espíritu es el que ensancha el progreso de las luces”
La libertad es el principio rector de la vida política
de Bolívar. “La libertad es el poder que tiene cada hombre de hacer cuanto no
esté prohibido en la Ley. En
el discurso de Angostura expresó: “Que los hombres nacen todos con derechos
iguales a los bienes de la sociedad”, pero también reconoce las diferencias que
existen entre cada individuo. La igualdad es una igualdad política para
disfrutar los bienes y derechos sociales. “La naturaleza hace a los hombres
desiguales en genio, temperamento, fuerzas y caracteres”. Las leyes corrigen
estas diferencias porque colocan al individuo en la sociedad para que la
educación, la industria, las artes, los servicios, las virtudes le den la
igualdad de derechos políticos y sociales. Para Bolívar “La libertad civil, la
seguridad individual, la propiedad y la igualdad ante la ley se garantiza a los
ciudadanos en la constitución”.
“El gobierno es producto de la vida colectiva, cuando
olvida su origen y se lo edifica con prescindencia total o parcial de su
circunstancia, está condenado al fracaso” para Bolívar el gobierno debe
fundarse “sobre nuestras costumbres, sobre nuestra religión, sobre nuestras
inclinaciones y últimamente sobre nuestro origen y sobre nuestra historia”. En
el Gobierno concebido por Bolívar priva lo moral “El gobierno debe ser justo,
liberal, fuerte, popular y sencillo; y todo ello cristalizará jurídicamente en
un gobierno Republicano, civil y democrático”. Se opone a un tipo de gobierno
Federalista que a su juicio resulta débil y complejo.
La síntesis del gobierno aspirado por Bolívar es un
“gobierno que haga reinar la inocencia, la humanidad y la paz. Un gobierno que
triunfe bajo las leyes inexorables de la Igualdad y la Libertad ”.
Excelente artículo
ResponderEliminarmuy maravilloso articulo
ResponderEliminargracias por informarnos muy bien sobre esta historia tan relevante.En la historia del Perú